Cada vez más, las principales ciudades de todo el mundo luchan por transformarse en espacios más innovadores a través de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC). Su utilización no solo supone mejoras en la provisión de los servicios, sino que allana el camino para convertir nuestras ciudades en verdaderas Smart Cities.
Para recibir la calificación de ‘ciudad inteligente’, no es suficiente con ser sostenible en una única área. La implantación de nuevas tecnologías, la participación ciudadana en la vida pública, la búsqueda de la eficiencia en la gestión de los recursos disponibles, el incremento la calidad de vida de los ciudadanos, y visitantes, son algunas de las características que hacen a una ciudad inteligente.
Claves para entender la importancia de las Smart Cities
- El Internet de las Cosas (IoT). Actualmente, solo el 1% de todas las herramientas, productos o servicios inventados están conectados a Internet. Por tanto, el potencial que tiene este IoT en nuestras casas, es enorme. Se prevé que en 2020, el 40% de todos los datos globales procederán de los sensores de este tipo de dispositivos.
- El concepto de Smart City engloba a varias industrias. los transportes, los residuos, la e-Sanidad, dando una cobertura universal a nuestros ciudadanos con mejores herramientas y en un menor tiempo, o la energía, una de las industrias que más rango de eficiencia puede obtener.
- Fast IT. Según los expertos, para poder iniciar esta transformación digital a tiempo, es necesario adoptar un modelo más eficiente llamado Fast IT. Las grandes multinacionales que mueven la evolución del mundo generen un 40% de innovación por cada 60% de operación, acelerando así el ritmo de innovación a nivel global.
- En España se ha creado un Plan Nacional de Ciudades Inteligentes con un presupuesto de 152,9 millones de euros.
En Esferize siempre recibimos este tipo de noticias con ilusión. Nos hacen imaginarnos nuevos retos y escenarios en los que poder formar parte de una importante transformación gracias a nuestra experiencia. En áreas claves como la ciberseguridad, la creación de infraestructuras de acceso a Internet o la implantación de sistemas de control ambiental inteligentes entre otras.