No han sido pocos los intentos a lo largo de este año de utilizar los beneficios de la tecnología para evitar el cierre de la hostelería. El conocido como sector HORECA —que agrupa a hoteles, restaurantes y cafeterías— ha invertido grandes sumas de dinero en medidas de seguridad. Estas han sido impuestas desde las administraciones con el objetivo de garantizar la seguridad de la población durante la pandemia.
A pesar estos esfuerzos, sus negocios se ven abocados al cierre indiscriminado y globalizado al aumentar los contagios. Hecho que se justifica con el hecho de que las administraciones no pueden verificar el cumplimiento de las medidas impuestas, porque no hay un protocolo de registro de actuaciones en cada local.
Solución innovadora
Para poner fin a esta problemática surge el proyecto ‘Sistema inteligente en sector HORECA para minimizar el riesgo de contagios víricos tipo SARS-CoV-2 —HoreCoV-21—‘.
La idea es desarrollar un sistema inteligente de monitorización y disminución del riesgo de contagios víricos tipo SARS-CoV-2 en el sector HORECA. Se pretende garantizar y aumentar la salud y la seguridad de trabajadores y clientes mediante una herramienta TIC. Esta prepararía a la hostelería de una forma competitiva y segura para controlar el riesgo de contagios en sus instalaciones.
El objetivo es sensorizar el sector HORECA con tecnologías de última generación. Entre ellas, cámaras de inteligencia artificial (IA) para medición de distancia, microcámaras térmicas integradas en SmartGlasses, medición de tamaños de partículas en aire y CO2, realización de PCR en aguas residuales de los locales y medición de distancia interpersonal mediante tokens de proximidad.
Los datos obtenidos y registrados serán procesados mediante una herramienta de IA que suministrará un nivel de riesgo del local en base a la información recibida por los sensores. El paquete de aplicaciones desarrolladas suministrará valiosa información a los actores del sector. De esta forma, los establecimientos podrán aplicar medidas correctoras en el caso de su incumplimiento, lo que ayudará a mitigar la propagación del virus. Además, las administraciones podrán monitorizar en tiempo real el estado del sector y actuar de manera localizada evitando cierres totales. Por último, el consumidor final podrá conocer la seguridad de los locales antes de realizar una reserva, incrementando la confianza en los mismos.
Funcionamiento
HoreCoV-21 permitirá el desarrollo de tecnología y su transferencia a la hostelería. De este modo, ayudará a minimizar el impacto socioeconómico de la pandemia en el sector permitiendo una rápida recuperación; reducir la alarma social mediante la instalación de dispositivos electrónicos —como módulos sensores que medirán partículas en suspensión o la presencia vírica en aguas residuales— que mitiguen la percepción de alarma en los establecimientos hosteleros; y reforzar la lucha contra la enfermedad a nivel institucional y social suministrando información en tiempo real del estado de los establecimientos hosteleros.
Además, el sistema contará con un agente flexible de Inteligencia Artificial basado en la nube —plataforma Cloud-loT—. Este analizará y modelará los datos adquiridos, para, finalmente, informar a los diferentes usuarios del sistema de la periodicidad de desinfección de los espacios e instalaciones hosteleras, mostrar avisos relacionados con el mantenimiento del distanciamiento social, o incluso sugerir comportamientos concretos e itinerarios alternativos para minimizar el riesgo de contagio. Esta información se mostrará a través de diferentes tipos de interfaces de visualización e interpretación de datos —aplicación de móvil de Smartphone, interfaz web…—.
El sistema también posibilitará la activación automática de distintos dispositivos o avisos. El fin es mejorar las condiciones de seguridad y prevención en espacios interiores. Como, por ejemplo, distancia interpersonal, ventilación, procedimientos de desinfección, etc. Esto demuestra que el uso de la tecnología resulta indispensable para evitar el cierre de la hostelería.
Fuente: María José Moreno, La Verdad